PARA TI, HERMANA!
La familia como ya sabemos todos
no es algo que se elige, viene impuesta de serie. Esta forma inicial de
funcionamiento no determina que las relaciones entre los miembros a priori sean
buenas. Las familias con varios hijos,
durante la infancia, sufren constantemente las interacciones “amor-odio” entre hermanos,
reflejado en celos, amistad, competición, lealtad, necesidad, discusión,
dependencia, ausencia, pasión, peleas, etc. Durante los primeros años de vida
los hermanos cimientan su estilo de relación.
A partir de la Adolescencia
cuando los sentimientos del amor y el odio florecen con intensidad, pueden provocar
dificultades relacionales entre hermanos muy intensas y críticas, incluso generando problemas serios en la
estructura de la familia. Todo ello guarda relación con la necesidad de búsqueda de
identidad por parte de cada uno de los hermanos.
Sin embargo, en la última fase de
la pubertad si todo ha seguido su orden lógico y controlado aparece un sentimiento
emocional pleno, denominado “Amor Incondicional”.
El amor Incondicional provoca que
la relación entre hermanos se convierta en una alianza eterna, donde no existen
contraprestaciones, donde no te sientes juzgado, donde se recibe apoyo y ánimo,
donde encuentras tu faro en momentos de desorientación, etc. Además, se sienten
las alegrías y éxitos del hermano como algo propio, así como los momentos difíciles
y duros.
Tengo la suerte de vivir y
experimentar estás sensaciones a través de mis dos hermanas. En alguna ocasión
ellas me han pedido consejo con sus hijos cosa, que intento evitar directamente (con mis
sobrinos soy tío emocional no puedo ser educador). Pero hace unos días nuestra hermana
Gemma nos dio la mejor de las lecciones de vida que cualquier hijo y hermano
puede recibir.
Cuando por edad estamos más cerca
de relajarnos que activarnos, ella decidió cambiar su vida y luchar por su
vocación. Durante unos años con el mayor de los sacrificios, con el mayor de
los esfuerzos y con su total entereza ha conseguido su meta. Ella piensa que su ejemplo de superación ha
sido bueno para su hijo, cosa totalmente cierta. Pero no sólo para tu hijo,
también para todos los que te rodean. Como
hermano siento la mayor admiración que se puede tener hacia una persona y el
mayor de los orgullos de ser tu hermano, que se refleja en el amor incondicional
que te profeso.
Gracias por darnos el mejor ejemplo posible!
Autor: Iván Castro Sánchez
Ejemplo de superación para toda la familia, me incluyo!!! Gema te admiro, admiro tu fortaleza, tesón y constancia, admiro tu sencillez y la sinceridad de us palabras, por encima de todo: la humildad. Felicidades campeona!!! De mayor quiero ser como tú!!!😂😂😘😘
ResponderEliminar